¡Carnívoro!... No, sino lo contrario,  herbívoro.

Un grupo de paleontólogos que estudiaban el fósil del ave gigante Diatryma (o Gastornis) concluyeron inicialmente que dicho animal había sido un depredador debido a su tamaño (más de dos metros de altura), su gran cabeza y su pico. Además, el fósil de Diatryma había sido encontrado junto a huesos de pequeños animales mamíferos los cuales se asumió eran los restos de las presas de dicha ave.

Diatryma ha sido ilustrada en distintas ocasiones como una creatura feroz aterrorizando a otros animales. Muchos conocen a este animal como “el ave que reemplazó a los dinosaurios como el depredador más importante”.

Sin embargo, recientes descubrimientos de huellas de Diatryma preservadas en roca sedimentaria en el noroeste de Washington en los Estados Unidos, ha llevado a los científicos a reconsiderar su postura. Ahora se promueve la idea de que Diatryma no era un animal carnívoro sino un “gentil herbívoro”.

“Las huellas claramente muestran que el animal no tenía grandes garras, sino al contrario, pequeñas uñas” afirmó David Tucker de la Western Washington University. “Esto contradice a un animal que atrapa a su presa y utiliza sus garras para mantenerlo inmóvil. Todas las aves carnívoras tienen garras largas y puntiagudas”.

Además, Diatryma no tenía un gancho al final de su pico, lo cual es una característica de todas las aves de rapiña y que les ayuda tanto a sujetar a su presa como para arrancarles pedazos. Debido a que había mucha presión de presentar a Diatryma como carnívoro, se pasó por alto su dieta. El investigador de la Western Washington University, George Mustoe, afirmó: “Seamos honestos, los carnívoros feroces atraen más atención que los gentiles herbívoros”.

Y de hecho, así es. Por tanto, la gran publicidad en los medios sobre un cruel carnívoro promueve la idea evolutiva de la supervivencia del más apto como la causa que permitió la formación y permanencia de las especies, incluyendo el hombre. En un completo contraste la Palabra de Dios, la Biblia, afirma que originalmente todas las creaturas fueron creadas según su género y eran herbívoras. También la Biblia advierte que llegaría un día en que las personas deliberadamente olvidarían esta verdad al igual que el diluvio de los días de Noé (2ª Pedro 3:3-6) engañándose entonces a ellas mismas acerca de la explicación de aves y mamíferos enterrados juntos, así como las exquisitamente bien preservadas huellas en roca sedimentaria.

Traducido de: “Carnivore! No, it’s a herbivore instead”. Creation Magazine Vol. 35, No.3 página 9.

Giant Eocene bird was “gentle herbivore”, study finds, bbc.co.uk, 23 de Noviembre, 2012.